PASSION BEACH (DEVILS OF VIOLENCE & SEX)

FICHA TÉCNICA

Título Original:
Daimones tis vias kai tou sex
Dir: Pavlos Parashakis
Año: 1973
País: Grecia
Cast: Gisela Dali, Rena Kosmidou, Nikos Tsachrididis, Vangelis Kazan, Petros Makedon, Giorgos Stratigakis, Vicky Johnson, Giorgos Peliwouris

REVIEW

Un buscavidas llamado Jason (Giorgos Stratigakis) regresa a Grecia y busca refugio en la casa de su amigo Michalis Drakakis, en una solitaria y apartada playa. Pero allí solo encuentra a la esposa de Michalis, Mary (Gisela Dali), a la hermana de ésta, Magda (Rena Kosmidou), y a un rudo pescador que responde al nombre de Kosmas, pero que en realidad es un contrabandista de whisky. Jason se da cuenta que a Kosmas no le hace gracia su llegada y se percata que allí sucede algo extraño. Por su parte Magda sospecha que hay algo oculto en el maletero del coche del recién llegado... tal vez un cadáver. Unos días después Kosmas saca el cuerpo de Michalis del mar, hecho que coincide con la aparición en la isla de dos peligrosos delincuentes: Massey el judio y Hans el alemán.

Protagonizada por Gisela Dali, máximo icono del cine sexy griego años 60 y 70. En apenas dos años, Gisela Dali hace tres películas consecutivas con el director Pavlos Parashakis: Mirella (Mirella, i sarka tis idonis), Amilia la perversa (Aimilia, i diestrammeni) y la que nos ocupa, Devils of Violence and Sex (también conocida como Passion Beach). En la primera es una esposa que convence a su amante para asesinar al marido; mientras que en la segunda interpreta a una maestra viciosa que resulta ser una especie de mantis religiosa.

Devils of violence and sex, es posiblemente la más potente de Parashakis. Aquí Gisela Dali está rodeada por una jauría de machos en celo, matándose todos contra todos en una playa desierta por un maletín lleno de dólares. La diva es continuamente salpicada por la sangre mientras intenta escapar de todo tipo de abusos. Otra exploitation de violentos criminales fugados que someten a las desdichadas protagonistas; aunque en este caso no encontramos ningún personaje que se pueda considerar positivo en la trama, acabando todo en una absoluta masacre.

Como en la mayoría de este tipo de producciones griegas, la banda sonora no está compuesta por temas originales... No hace falta aclarar que hablamos de coger música de otras películas sin permiso. Resulta un aliciente más en cada uno de estos títulos helenos, descubrir qué película o grupo ha sido acribillado. En esta ocasión destaca una pieza súper funk original del dúo francés Resonance titulada  "OK Chicago", realmente molona, digna del mejor cine blaxploitation.