EL CIUDADANO SE REBELA

FICHA TÉCNICA

T.O: Il cittadino si ribela
Aka: Street Law
Dir.: Enzo G. Castellari
Año: 1974
País: Italia
Música: Guido de Angelis
& Maurizio de Angelis 
Cast: Franco Nero, Giancarlo Prete, Renzo Palmer, Barbara Bach, Renata Zamengo, Nazzareno Zamperla, Massimo Vanni, Romano Puppo.

REVIEW

Sinopsis: El ingeniero Antonelli es víctima de unos actos criminales y, frente a la impotencia de las fuerzas de policía, decide tomarse la justicia por su mano. En la ciudad de Génova, que se está volviendo más peligrosa cada día, vive el ingeniero Carlo Antonelli (Franco Nero), un hombre tranquilo y respetuoso de las leyes. Antonelli lleva una vida acomodada, tiene su actividad empresarial, vive en una casa confortable y está comprometido con la hermosa Barbara (Barbara Bach). La “visita” de unos ladrones en su casa, sin embargo, va a perturbar su tranquila existencia.
Los delincuentes no se limitan a robar, sino devastan su vivienda y, como ofensa añadida, mean sobre las alfombras y los sofás.
Para colmo, mientras el pobre ingeniero está en una oficina de correo, será atacado, robado y le tomaran como rehén.
Antonelli, cansado de la inoperancia de las fuerzas del orden y sobre todo de las respuestas que le da el comisario de policía (Renzo Palmer), el cual tendría que ocuparse de su caso, decide que ha llegado el momento de que él se tome la justicia por su mano.
Para adentrarse en los oscuros laberintos del hampa, pide ayuda a Tommy (Giancarlo Prete), un pequeño e insignificante delincuente.
Comentario: Enzo G. Castellari, con esta película, examina un asunto muy querido por el cine policial italiano de esa temporada: la impotencia de las fuerzas de policía, frente a la criminalidad difusa.
Il cittadino si ribela es la típica película de “mayoría silenciosa” y no hace nada para esconderlo, aunque si Castellari intenta dar una noble raíz ideológica al buen ciudadano que se transforma en justiciero.

La validez de esta tesis se puede notar en dos elementos que se encuentran en la película:
1) en casa del ingeniero Antonelli aparece, colgado en la pared, un manifiesto partisano que incita a la rebelión;
2)Antonelli, durante un coloquio con su abogado, recuerda las acciones heroicas de su padre que se rebeló contra los nazifascistas.

La película es muy buena, el director alterna escenas de acciones de fuerte impacto con dramas psicológicos, en el marco de la ciudad de Génova, que, con sus calles estrechas y su imponente puerto, es el lugar ideal para el desarrollo de esta trama. La última secuencia de la peli es inolvidable: ahí, Franco Nero, amargado, recupera la sonrisa escuchando a un hombre que, en la comisaría, amenaza tomarse la justicia por su mano si la enésima agresión que ha sufrido quedará impune.
Después de 35 años esta película, desafortunadamente, sigue siendo, en Italia, de candente actualidad.
NOTICIAS – CURIOSIDADES:
Para que el director Enzo G. Castellari, pudiera filmar unas escenas en los famosos “carruggi” (callejones) de Génova se le “aconsejó” de no dirigirse a la policía municipal para pedir los permisos necesarios, porque la presencia de las fuerzas del orden y sobre todo el cierre de unas calles hubieran podido perjudicar las “actividades” de algunos residentes.
El director, para conseguir el “permiso” de rodar las escenas recurrió luego a un tal Don Vincenzo Pummarola (“pummarola” es una palabra del dialecto napolitano que significa tomate: no era el apellido sino el sobrenombre de Don Vincenzo, debido al anillo que él llevaba al dedo con encima un rubí tan grande como un tomate), anciano boss del barrio que aseguró al director toda la colaboración para la realización de la película, poniendo también a su disposición los hombres necesarios para bloquear los accesos a las calles durante las tomas y logrando en cambio la promesa de que las fuerzas del orden no se hubieran presentadas allí.
Il cittadino si ribela es uno de los policiales más vistos de esos años, con una taquilla de mil setecientos millones de liras, y eso en 1974!!! La película fué acogida mal por la crítica, fué vapuleada por LA STAMPA y IL MESSAGGERO (unos de los más importante periodicos italianos) mientras IL GIORNO fué más benévolo.

Review by Fabrizio Luperto